RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS

Nosotras queremos hablaros de la mediación, que es una de las estrategias más utilizadas en los centros educativos para resolver conflictos.

La mediación se puede definir como el proceso con el cual podemos crear un clima de diálogo y entendimiento entre dos partes que entran en conflicto, con el fin de poder llegar a una solución factible y adecuada para ambos. Para ello se recurre a una tercera persona, imparcial y que va guiando a los implicados: el mediador. El mediador puede ser el profesor o cualquier otra persona del centro.

El mediador debe marcarse unos objetivos específicos que pueden ser por ejemplo: concienciar a las dos partes de la naturaleza positiva del conflicto, aprender estrategias para resolverlos, poner en práctica estas estrategias e instaurar una cultura de resolución de conflictos.

Basándonos en la propuesta de Burguet, en el proceso de mediación se establece 3 periodos:

Reencuentro de los protagonistas: Es preciso convocar a las dos partes, restablecer los canales de comunicación, concretar los objetivos de la mediación y diseñar acuerdos preliminares de procedimiento.

Descripción de la estructura del conflicto: Es necesario reunir la información necesaria y abordar los problemas fundamentales, describir el conflicto y sus antecedentes e identificar con claridad el problema y su contexto.

Buscar acuerdos para resolver la cuestión: En esta etapa cobra gran importancia la escucha activa (compartir puntos de vista extremos, esfuerzo por comprender al otro). Se deberá: concretar las necesidades, prever las metas y alternativas hacia la gestión del conflicto, establecer un acuerdo, que se redacte y se firme, así como comprometer a las partes a cumplir lo aprobado.

De esta forma, los alumnos aprenden a interpretar el conflicto de forma positiva, como una oportunidad para el cambio y para el entendimiento y sin necesidad de utilizar la violencia o el enfrentamiento. A la vez, les ayudamos a desarrollar una mayor autonomía y una gran confianza en ellos mismos para formarlos en el complejo proceso de “aprender a convivir y a ser persona”.